En inversión, los instrumentos complejos son productos financieros que van más allá de las inversiones convencionales sencillas, como las acciones o los bonos simples. Estos instrumentos suelen presentar características, riesgos o estructuras especiales que pueden dificultar su comprensión y evaluación. Estos son algunos de los tipos más habituales:
- Derivados:* son contratos financieros cuyo valor se basa en el rendimiento de un activo subyacente, como acciones, bonos o materias primas. Algunos ejemplos son las opciones, los futuros y los swaps. Pueden emplearse con fines especulativos o de cobertura, pero conllevan un riesgo mayor.
- Productos estructurados:* son paquetes de inversión preconfigurados que combinan varios instrumentos financieros y a menudo incluyen derivados para componer un perfil de riesgo/rentabilidad personalizado. Pueden ofrecer pagos basados en el rendimiento de un conjunto de activos, pero con distintos niveles de riesgo.
- Bonos complejos: son bonos con particularidades añadidas, como que se pueden amortizar anticipadamente, revender o convertir en acciones, lo que hace más difícil fijar su precio y evaluarlos.
- Productos apalancados:* estas inversiones magnifican las ganancias y pérdidas potenciales, a menudo mediante dinero prestado o derivados financieros. Pueden dar grandes rendimientos, pero también exponen a los inversores al riesgo de sufrir pérdidas importantes.
* En el momento de redactar este artículo, estos instrumentos no están disponibles en Lightyear.
Cuando quieras operar con estos instrumentos, la aplicación de Lightyear te hará primero unas preguntas para evaluar tus conocimientos sobre ellos. Al terminar el cuestionario, la aplicación te indicará si estos instrumentos son adecuados para ti en función de lo que sabes de ellos en ese momento. Puedes operar con instrumentos complejos independientemente del resultado del cuestionario, pero debes tener en cuenta que podrías estar asumiendo riesgos de los que no eres plenamente consciente.
¿Por qué debo someter mis conocimientos a evaluación antes de operar con instrumentos complejos?
Una evaluación de idoneidad es un proceso que las instituciones financieras aplican en Europa para determinar si ciertos productos financieros, como los bonos complejos, son adecuados para inversores particulares. El objetivo es cerciorarse de que el inversor entiende los riesgos, la complejidad y las peculiaridades del producto, y que tenga los conocimientos y la experiencia suficientes para tomar decisiones fundamentadas sobre la inversión. Esta evaluación es crucial para evitar que los inversores asuman riesgos que posiblemente no comprendan del todo, especialmente en el caso de productos como los bonos complejos.
Consulta también el artículo Bonos.